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El cielo comienza donde termina el mar
Sérgio Machado Gomes

 

“Camino y siento la arena húmeda envolver mis pies, ahora descalzo.

Tantas veces te hablé

sentado aquí mismo, con las estrellas o la luna o el sol como testigos.

¿Recuerdas?

Siempre estaba en silencio, lo sé ...

... pero fue aquí, sentado en la arena, donde te conté tantos secretos ...

Me perdí en la multitud de veces que lo he hecho ... tú también, para perder de vista, hasta que te confundas con el cielo ...

... No sé si terminaste, si comienza el cielo ...

... pero tengo una certeza: que también me envía besos, a través de una suave brisa, en una calurosa tarde de verano o en una noche de luna.

A veces, cuando estoy triste y en una conversación no convertida, es en tu inmenso abrazo que me encuentro, sentado en esta misma arena, con la brisa que soplas rápido y las lágrimas se secan ahí ...

... ya he perdido la cuenta, la cantidad de veces que lo has hecho ...

¿Recuerda?

Tú siempre decías:

-Escribe aquí, en mi arena, tus problemas ...

Y justo después viene una ola amistosa, borrando lo que se debe olvidar,

recordándome de nuevo lo que es vivir,

con un beso descansando en mis pies húmedos ...

El cielo, las olas, el mar, las estrellas y la luna ...

Los compañeros fieles son: ¿necesitaré algo más para ... amar?

- Mar, suficiente. Quien hace las preguntas ahora soy yo:

¿A dónde quiero ir, también habrá luz de luna?

¿Me abrazarán también las estrellas, el sol y la brisa?

Como lo haces tan bien y también lo haces aquí, de este lado ... ¿debo esperar lo mismo de allá?

Sí, lo llaman "cielo", lo sé ... Pero, ¿realmente comenzará donde terminas tú, y quién lo hizo, ¿qué le dio?Por allá, o por aquí ... y el bote, ¿qué se ha hecho de él?Sí, ese fiel amigo, que me llevó, ola tras ola, tratando de llegar al horizonte, allá, lejos, donde terminas y comienza él ...... pero cuando parecía que llegaba, se fue de nuevo, temiendo descubrir que, al fin y al cabo, él también tiene sus secretos y sus miedos ...... sus encantos y desencantos ... como todos tenemos, aquí, de este lado ...Necesito encontrarla, lo sé, pero primero tengo que averiguar qué camino tomar ... ¿ir o quedarme?¿Es importante el sabor del mar? ¿O te refieres a saber amar?"María”, ¿dices?¿Es realmente mar?¿Puedo confiar? Y el cielo comienza ahora, ¿dónde terminas?Porque para amar, dices, mar, tengo que empezar de nuevo donde se suponía que ... ¿terminaría?Allí, ¿dónde comienza el cielo?Entonces, ¿ésta es la tierra a la que voy?O el mar, la arena, el sol, las estrellas, el cielo y las olas ... después de todo, ¿son lo que realmente soy? No quiero nada de eso si no la tengo: quédese con el barco, la arena, el cielo y todo lo demás que siempre fue tuyo.Nada de esto lo necesito, ya que nunca fue mío.Si la tengo, entonces ya habré llegado al cielo ...¡Porque, mar, para mí, el cielo comienza donde termino amando!”
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“Caminho e sinto a areia húmida envolver os meus pés, agora descalços.

Tantas foram as vezes que contigo conversei, 

sentado bem aqui, com as estrelas, a lua ou o sol como testemunhas.

Lembras-te?
Foi sempre em silêncio, eu sei...

...mas foi aqui, sentado na areia, que tantos segredos meus te contei...

Perdi-me já na imensidão de vezes que o fiz...assim és tu, também, de perder de vista, até te confundires com o céu... 

...não sei se acabas tu, se começa o céu...

...mas uma certeza eu tenho: a de que também ele me envia beijos, através de uma brisa suave, numa tarde de verão quente ou numa noite de luar.
Por vezes, quando estou triste e numa conversa desconversada é no teu abraço imenso que me reencontro, sentado nesta mesma  areia, com a brisa que tu sopras rapidamente e  as lágrimas lá secam...

...já lhe perdi a conta, o número de vezes que o fizeste...
Lembras-te? 

Tu dizes sempre:
-Escreve aqui, na minha areia, os teus problemas...
E logo de seguida vem uma onda amiga, apagar o que é para esquecer, 

recordando-me de novo o que é viver, 

com um beijo pousado nos meus pés húmidos...
O céu, as ondas, o mar, as estrelas e o luar...
Fiéis companheiros são: precisarei eu de algo mais para...amar?
- Mar, chega. Quem faz as perguntas agora sou eu: 

Para onde eu quero ir, também haverá luar?
As estrelas, o sol e a brisa, também me vão do lado de lá abraçar?

Como tu tão bem e também o fazes aqui, do lado de cá...devo eu esperar o mesmo, lá?

Sim, chamam-lhe “céu”, eu sei...
Mas começará mesmo ele onde tu acabas, e quem o fez a ele, o que lhe deu?
Do lado de lá, ou do lado de cá...e o barco, que é feito dele?
Sim, aquele fiel amigo, que me levava, onda atrás de onda, a tentar chegar à linha do horizonte, lá, bem longe, onde tu acabas e ele começa...

...mas quando eu parecia estar a chegar, ele partia de novo, com medo de descobrirem que, afinal, também ele tem os seus segredos e os seus medos...

...os seus encantos e desencantos...como todos nós temos, aqui, do lado de cá...
Preciso encontrá-la a ela, eu sei, mas primeiro tenho de descobrir qual o caminho a seguir...ir ou ficar?
O importante é o sabor a mar?
Ou queres tu dizer, o saber amar?
"Maria", dizes tu? 

Será mesmo, mar? 

Poderei eu...confiar?
E o céu, começa agora, onde tu acabas? 

Porque para amar, dizes tu, mar, que tenho de recomeçar onde era  previsto...acabar?

Lá, onde começa o céu? 
Então é essa a terra para onde eu vou? 

Ou  o mar, a areia, o sol, as estrelas, o céu e as ondas...afinal, são aquilo que realmente eu sou?
Não quero nada disso se a não tiver a ela: fica com o barco, a areia, o céu e tudo o mais que sempre foi Teu. 

Nada disso preciso, pois nunca foi meu.
Se a tiver a ela, então já terei chegado ao céu...

Porque, mar, para mim, o céu começa onde Eu acabo a amar!”

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Ficha del autor

Sérgio Machado Gomes

Graduado en Ingeniería Civil por la Facultad de Ciencia y Tecnología de la Universidad de Coimbra, Portugal. La enseñanza de las Matemáticas la lleva a cabo de forma profesional. La naturaleza, el dibujo, la música, el karate y el ejercicio físico, regularmente complementan su gusto por la escritura. Se ve a sí mismo como un ser humano adverso a las redes sociales.